lunes, 5 de abril de 2010

La USAlud En Reforma y Cambio



Daniel Merchán M.

Seguramente uno de los grandes temas que aborda el gobierno de Obama en EEUU es la reforma sanitaria, tanto por las repercusiones potenciales que puede tener sobre la población, como por lo que significa de introducción en un país tan enemigo de las regulaciones de un sistema de protección social universalizado como por la resistencias que esta teniendo y que presumiblemente van a ir en aumento.

El indudable salto dado por la Administración Obama con la aprobación de la reforma sanitaria significa un paso histórico al incluirse la protección de 47 millones de personas no aseguradas. Sin embargo, la calidad de la cobertura va a seguir dependiendo en gran parte de las aseguradoras privadas y del modelo de pólizas que ha imperado hasta ahora. Poco que ver con la cobertura universal existente en la mayoría de países europeos donde las opciones ofrecidas por el Estado están disponibles para la mayoría de los ciudadanos sin ningún coste para ellos.



El cambio principal que introduce esta reforma sanitaria es que se "acaba con la discriminación" de los enfermos, tal y como reflejan los objetivos de la ley Obama, los seguros privados ya no podrán expulsar de su seguro a quienes adquieran una enfermedad grave o de larga duración ni podrán restringir el acceso a ese seguro a personas que padezcan una enfermedad previamente. Pero el cambio será paulatino. Primero se aplicará únicamente a los pacientes menores de edad y en principio no será hasta 2014 cuando las aseguradoras tengan esta obligación para con toda la población con cobertura sanitaria. Además, se creará un organismo estatal de control que entre otras cosas tendrá la potestad de permitir o bloquear posibles subidas en las tasas que cobren las aseguradoras a los individuos y empresas.



La imposición a las aseguradoras médicas a no negar la cobertura sanitaria a ninguno de los dos casos en los que hasta ahora se les permitía, permite ahora obligar también a los ciudadanos estadounidenses y residentes con papeles a contratar un seguro. Quedan excluidos de esta obligatoriedad los ciudadanos con graves dificultades económicas, los inmigrantes sin papeles, los indios americanos. Las empresas con 50 o más empleados deberán ofrecer cobertura médica a todos ellos pagando 2.000 dólares por cada uno de ellos, en caso de que el Gobierno finalmente financie unos subsidios para la cobertura de los empleados, Las compañías con hasta 25 trabajadores y sueldos medios por debajo de 40.000 dólares anuales obtendrán incentivos fiscales. En cuanto al Medicaid, sistema público para los pobres, éste se ampliará para las personas que tengan dificultades para acceder a un seguro: se ampliará para los individuos que ganen menos de 16.500 dólares, y a las familias de cuatro miembros que ganen menos de 39.000 dólares al año. En cuanto al Medicare, el programa público que beneficia a las personas mayores, será ampliado de forma gradual, hasta 2020, para cubrir también la parte proporcional de los gastos de farmacia aún no cubiertos. De manera generalizada y para las personas de ingresos medios y pequeños negocios, se facilitarán una serie de subvenciones, de manera que las familias de cuatro que ingresen al año menos de 88.000 dólares se podrán acoger a esos subsidios progresivos, al igual que los individuos que ganen al año menos de 43.000. Se estima que unos 19 millones de americanos recibirán una media de 6.000 dólares anuales.



El propio presidente de Estados Unidos ha insistido en que la reforma sanitaria aprobada ahora significa únicamente un paso más en la cobertura médica de sus compatriotas y de los residentes en Estados Unidos. "Ésta no es una reforma radical, aunque es una reforma de gran envergadura. Esta nueva ley no será capaz de depurar todos los defectos de nuestro sistema sanitario, pero gracias a ella nos movemos en la buena dirección", ha afirmado. Desde luego parece coherente que esta reforma se haya aprobado si tenemos en cuenta que el sistema sanitario de EE.UU. aún vigente, deja fuera de la cobertura médica a millares de personas, ya era hora de que este polémico sistema se vuelva un poco más justo para todos y se cumpla el famoso ‘Yes we can’ que tanto enfatizaba Obama y sus fieles seguidores, esperemos que el tiempo próximo nos muestre mayores punto positivos, que carencias, en virtud, del beneficio total de la salud y de cada uno de los afectados.

Twitter: @Daniel_Merchan

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